GR 124. Senda Real
Historia
En 1405 el rey Enrique III de Castilla ordenó la construcción de una Casa Real en el Monte de El Pardo dada su riqueza cinegética. Al lugar se accedía desde el Real Alcázar, situado donde hoy en día el Palacio Real, mediante una senda que, a través de la Puerta de la Vega o bien de otra situada más al norte, descendería hasta la margen izquierda del río Manzanares para, desde aproximadamente lo que actualmente es la glorieta de San Vicente, dirigirse hacia el norte paralela al cauce por lo que actualmente son el Paseo de la Florida y la avenida de Valladolid. Si bien en los anteriores mapas de la ciudad todavía no es visible la senda, por abarcar aquellos sólo la zona amurallada de la ciudad, en el plano de Pedro Teixeira, de 1656, ya consta un “Camino del Pardo”. En un mapa dibujado por las tropas francesas en 1808 figura la “Route del Pardo” hasta el puente de San Fernando.
Aun con el crecimiento de la ciudad, la Senda, sobre cuyo trazado se hizo posteriormente la carretera de El Pardo, ha seguido practicable hasta la actualidad, aunque en algunos momentos ha estado a punto de desaparecer bajo las sucesivas ampliaciones de la M-30, autopista de circunvalación de la ciudad. Así, a finales de los años 80, al cerrarse por el oeste dicha carretera, superponiéndose en parte de su trazado a la citada carretera de El Pardo, el camino vio reducida su anchura, perdiendo una zona arbolada en su parte derecha, aunque todavía podía usarse. Un camino alternativo usado en la zona de la Ciudad Universitaria de la Universidad Complutense entre el puente de los Franceses y la Facultad de Veterinaria, desplazando la Senda tradicional hacia el este, fue la calle denominada precisamente Senda del Rey. En mayo de 1999, nuevas obras de ampliación de la autopista amenazaron la supervivencia de la ruta, lo que llevó a varias asociaciones ciudadanas, agrupadas en torno a Ecologistas en Acción y Salvemos la Dehesa de la Villa, a denunciar la situación y a pedir ayuda a diversas administraciones.Recorrido
El recorrido se suele hacer en dos jornadas. La primera desde Madrid a Tres Cantos y la segunda entre esta localidad y Manzanares el Real. No obstante, a lo largo de todo el recorrido existen diversos puntos en los que se puede tomar un transporte público.
Primera Jornada
La Senda Real comienza junto a la estación de Príncipe Pío y continúa por el Paseo de la Florida, en el que se pueden observar ejemplares de acacia de gran tamaño, hasta la ermita de San Antonio de la Florida, a cuyas espaldas pueden apreciarse unos grandes ejemplares de plátanos, plantados en 1794 por el jardinero real Pierre Boutelou. Cuenta la tradición que bajo uno de ellos se sentaba Goya a pintar. El camino continúa por la avenida de Valladolid, en la que otros magníficos ejemplares de esta especie indican por donde iba la ruta, hasta llegar al puente de los Franceses (2 km).
Aquí se une un ramal alternativo del camino proveniente de la estación de Lago, situada en la Casa de Campo. Por el margen de la antigua carretera de El Pardo se continúa por la zona de la Senda que está siendo mejorada (noviembre de 2008), donde se pueden observar otros ejemplares muy grandes de plátanos cuyo tronco es sólo abarcable por cuatro personas. El camino bordea por el suroeste la Ciudad Universitaria y el complejo del Palacio de la Moncloa (3’3 km) hasta llegar a la facultad de Veterinaria para luego pasar bajo la Avenida de la Puerta de Hierro (N-VI).
Poco después se salva la calle de Sinesio Delgado (4’7 km) mediante la primera de las pasarelas construidas, donde se une otro segundo ramal alternativo que comienza en el kiosco de La Paloma de la Dehesa de la Villa. Continúa el camino hacia el norte junto a la tapia del Club Puerta de Hierro, dejando a la izquierda primero la Puerta de Hierro y posteriormente una pasarela del Anillo Verde ciclista que comunica con el puente de San Fernando. A partir de este punto continuamos por la citada vía ciclista durante aproximadamente un kilómetro hasta llegar a la calle Arroyofresno, en el límite norte del Club Puerta de Hierro.En este punto hay una pasarela para cruzar al club Playa de Madrid desde la que en el futuro se podrá acceder a una segunda pasarela que permitirá salvar la M-40. Sin embargo, este segundo paso no ha sido todavía construido (noviembre de 2008), por lo que el camino continúa por el lado derecho de la M-30, entre la autopista y una barrera antirruido que la separa de la colonia Puerta de Hierro, para posteriormente cruzar la calle Cardenal Herrera Oria. No obstante, este cruce es muy peligroso, por lo que es recomendable desviarse por la citada calle de Arroyofresno para, una vez pasado bajo el puente de la Avenida de la Ilustración, girar a la izquierda y cruzar Herrera Oria.
Descendemos por esta calle hasta la de Fuentemilanos, que primero va hacia el oeste y luego gira al norte y al final de la cual una nueva pasarela nos permite cruzar bajo la M-40 y sobre la carretera de El Pardo. Avanzamos por el arcén izquierdo de ésta hasta el punto kilométrico 1 (8’7 km), donde la cruzaremos para encontrar el primero de los paneles informativos sobre la Senda. A partir de este momento la ruta se interna en el monte de El Pardo hacia el noreste por la carretera que conduce al palacio de la Quinta, abandonando el camino histórico que seguía hacia el noroeste hasta el Palacio y desde allí a Manzanares el Real.
La Senda gira hacia el noroeste y avanza entre la citada vía y la tapia de El Pardo, por una zona muy tranquila desde la que se tienen estupendas vistas del interior del Monte, rodeados de encinas y alcornoques. Pasada la estación de El Goloso (18´85 km) continuamos junto a las líneas del tren de cercanías y del AVE, que sortearemos a la vez un par de kilómetros después mediante sendos pasos inferiores para enlazar con el carril-bici de Madrid a Colmenar. Avanzamos por éste hasta llegar a la pasarela que conduce a la estación de Tres Cantos (22’2 km). Desde aquí, donde suele concluir la primera jornada, podemos regresar a Madrid en tren o en autobús.
Segunda Jornada
La Senda se interna desde Tres Cantos hacia el oeste por la Cañada Real Segoviana hasta llegar al arroyo de Tejada (25’175 km), afluente del Manzanares, donde gira hacia el norte siguiendo su vega. Es esta una zona de transición hacia la sierra en la que, pese a la explotación ganadera, todavía pueden encontrarse encinas, enebros, jaras y espinos así como ejemplares de especies de ribera, muchos de ellos de reciente repoblación.
Desde este punto la Senda se ensancha, dada su condición de cañada, y se llega al alto del Enebrillo, desde donde divisamos Manzanares el Real y La Pedriza, y a la fuente de la Reina (44’325 km). Tras cruzar la presa del embalse de Santillana (45’9 km) llegamos a nuestro destino atravesando el puente medieval de la localidad (47’1 km), desde donde se puede regresar a Madrid en autobús. Además, la Senda Real enlaza aquí con el Sendero Puzol-Aldea del Obispo (Gr-10), que comunica la localidad valenciana de Puçol con Lisboa (Portugal), uniendo el Mar Mediterráneo con el Océano Atlántico.